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viernes, 25 de febrero de 2011

Mi inconsciente me reprende

Y aquí estas, otra vez, Giancarlo, haciendo gala de tu inconsistencia. Inconsistencia, sí, porque dices estar en contra de las actividades rebañezcas, de aquello que hace que las personas se comporten a la manera de robots, haciendo lo que otros hacen solo por el habito de la imitación, porque eso es culto, porque eso esta de moda, porque eso es lo que hacen los gringos, lo que dictan las transnacionales. ¿Y que hay más tonto y rebañezco que esto del Facebook?, me pregunto. Acaso no es este el lugar común de la frivolidad y la renuncia de ser individuo para ser masa, donde un montón de gente, que no tiene otra cosa mejor para hacer, gasta su tiempo escribiendo cosas inútiles, poniendo las fotos donde no salieron con la boca abierta, con los ojos cerrados, con la mirada desorbitada; haciendo comentarios repetitivos y sosos acerca de sus amigos repetitivos y sosos; visitando los facebook de muchachas con ganas de mostrar sus bondades naturales o artificiales, de gente que cree que su vida es lo suficientemente interesante como para andar compartiéndola con los demás.

Sé, porque te conozco hace mucho tiempo, que usaras para tratar de justificarte aquella frase famosa de Flaubert: « Le superflu est le premier des besoin », pero será solo un gesto frívolo de seudo intelectual, porque en el fondo sabes muy bien que estas traicionando a tus principios, si es que todavía los tienes.

Mientras estas revisando tu facebook, Giancarlo, cambiándole el estilo, haciéndolo más atractivo para tus amigos y visitantes, el mundo se esta cayendo a pedazos; en este preciso momento, muchos niños mueren de desnutrición, pandillaje o a causa de algún conflicto armado. Espero, aunque lo dudo, que estas palabras, duras pero necesarias, hagan cambiar, el rumbo que ha tomado tu vida. Recuerda esa frase que tu creaste, parodiando a Marx: “El Facebook es el opio del pueblo

domingo, 30 de enero de 2011

Mirada Infantil

Y si nos viera el niño que fuimos nos diría:
Ay, neurótico. Ay, solitario.
Yo no soñé con este presente.
Yo imagine la sonrisa siempre en mis labios
y las penas lejos de mi corazón.
¿Qué has hecho de mis esperanzas?
¿Qué fueron de mis ilusiones?
Ay, neurótico. Ay, solitario.
¿Por qué el ambiente tiene olor a dinamita?
¿Por qué el oro esta tan manchado de sangre?
¿Por qué los muertos de Cisjordania
no valen lo mismo que los muertos en Nueva York?
Ay, neurótico. Ay, solitario.
Estaba en un mundo de colores
y me has traído a este caos.
Devuélveme a mi padre superhéroe,
a mis policías atentos y caballeros.
Quítame esta coraza de desconfianza
que no hace juego con mis crayolas.

Y si nos viera el niño que fuimos,
¿se atrevería a crecer?

domingo, 12 de julio de 2009

NIRVANA - OSCAR HAHN

Excelente poema del poeta chileno Oscar Hahn:

Tienen rabia los cantantes de Rock and Roll
Tiene rabia Kurt Cobain

Golpean las guitarras contra la pared
como si golpearan sus rubias cabezas

Castigan los tambores hasta hacerlos sangrar

Soy mi propio parásito piensa Kurt Cobain
Mis héroes son los Sex Pistols
y mi heroína es la heroína

Vibran los platillos con los dientes apretados
Arden las llamas electrónicas

Hay un terrible olor a incienso en el escenario
Hay un terrible olor a azufre

Se metió
la pistola
en la boca
y disparó

Su mente quedó inactiva
Y así logró la experiencia del nirvana

Tienen rabia los cantantes de Rock and Roll

Tienen rabia contra el mundo
Tienen rabia contra el inmundo
Tienen rabia los cantantes de Rock and Roll

martes, 30 de junio de 2009

Lolita - Oscar Hahn

Somos los viejos locos
los viejos que nos acostamos
con muchachas 40 años menores que nosotros
los que tratamos de ignorar a la muerte
como si fuera una amante de otra época
a la cual ya no quisiéramos ver
y cruzamos muy rápido a la acera de enfrente
donde está la ninfa esperándonos
senos duros pezones rosados
y labios de la vulva frescos y rojos
no el sexo seco de la muerte
esa fruta que ya no da jugo
Y nos arreglamos el nudo de la corbata
mirándonos en la vitrina de una tienda
donde ahora vemos nuestra cara arrugada
el pelo escaso la barba canosa
entre computadoras y teléfonos celulares
y el reflejo de la muchacha que nos sonríe
con la guadaña en la mano

sábado, 15 de noviembre de 2008

Funeral Blues - W.H. Auden

Stop all the clocks, cut off the telephone,
Prevent the dog from barking with a juicy bone,
Silence the pianos and with muffled drum
Bring out the coffin, let the mourners come.

Let aeroplanes circle moaning overhead
Scribbling on the sky the message He is Dead.
Put crepe bows round the white necks of the public doves,
Let the traffic policemen wear black cotton gloves.

He was my North, my South, my East and West,
My working week and my Sunday rest,
My noon, my midnight, my talk, my song;
I thought that love would last forever: I was wrong.

The stars are not wanted now; put out every one,
Pack up the moon and dismantle the sun,
Pour away the ocean and sweep up the woods;
For nothing now can ever come to any good.

martes, 11 de noviembre de 2008

TWILIGHT - FRANCISCO BENDEZÚ

TWILIGHT


A Mercedes.

Yo soy el granizo
que entra aullando
por tu pecho desquiciado.

Soy tu boca.

Yo atesoré a ras del sueño,
debajo de las horas,
el latido de tus pasos por el polvo de Santiago,
y tu densa fragancia de magnolia,
y tu lenta cabellera
con perfil de éxtasis o algas,
y el ardor fulmíneo de tus ojos, que de noche,
como naves sobre el mar,
la bruma iluminaban.

Como guijarros de playa,
o nostálgicos boletos entre cintas y violetas olvidados,
enterré en mi corazón la línea de tu frente,
la piedra gastada de tus codos, tus sílabas nocturnas,
el fulgor de tus uñas, tus sonrisas,
la loca luz de tus sienes.
¿No sientes trasminar mi dolor a través de tu cuchara?
Mi memoria quedó tal vez en ti
como las ediciones vespertinas
en las bancas de los parques desahuciadas.

Tu sombra es mi tintero.
Juventud.
¡Juventud mía!
¿Qué tumbos socavaron
la torre más alta de mi vida?

¡No habrá nunca
hilo más puro
que tu larga mirada
desde lo alto de las escaleras,
ni lampo de cometa comparable
a la curva nevada de tus dientes!
Cantaba la mañana
en las pálidas cortinas y la hierba.
El tiempo cintilaba en tus vidrieras
como sólo una vez el tiempo parpadea.
Ya no estás entre las flores. Ni volverás
jamás a estarlo. ¿Qué tu amor sino labios
que escrituras en el viento fueron?

¡Yo quiero que me digan
si el amor, como los pájaros,
se va a morir al cielo!

Me acuerdo de una noche de trenzas y peldaños,
y óxido, y collares,
me acuerdo, como ayer, de lo futuro.
¡Quiero acuñar, como el otoño,
medallas en las calles,
o beberme llorando tu ausencia en los teléfonos,
o correr, correr a ciegas por
los tejados de todas las ciudades
hasta perderme para siempre o encontrarte!

¡Otra vuelta estar contigo!
¡Oh día de verano
extraviado en alta mar
como una mariposa!
Contra el flujo incoercible de los años
los días, uno a uno,
absurdamente buscan tu lámpara en las sombras,
no la penumbra, no el espejo de la muerte,
sino el cristal de la esperanza:
tu ventana que sólo está en la Tierra.

¡Aspersiones de ceniza para tu boca cerrada!
Otra vez tengo veinte años, y sonámbulo, y en llanto
a la puerta de tu casa estoy llamando,
al pie de tu reja, como antaño,
bajo la lluvia sin telón ni máscaras ni agua.
¡Oh zumbantes calendarios
que en vano el cierzo,
como a encinas,
deshojara!

¡No me digas que te quise! Te quiero.
Te debía este lamento, y aunque un grito
mi sangre apenas sea,
también te lo debía; un solo interminable
de un corazón en las tinieblas.

domingo, 2 de noviembre de 2008

Salutación - Juan Gonzalo Rose

Salutación - Juan Gonzalo Rose

Año nuevo en la sangre de los asesinados.
Año nuevo en la sala de torturas
y en el ojo del hombre prisionero
donde un tiempo sin sol hace su nido.

Año nuevo en la mesa del tirano
y en la percha vacía del destierro.
Año nuevo en la madre y en el hijo
separados tan sólo por un puente.

No tienen año nuevo los pueblos como el mío:
será nuevo paisaje, pero la misma ausencia;
será pañuelo nuevo, pero la misma lágrima;
será nueva mortaja, pero distinta muerte.

Pero violo el contrato con mi alma
y créceme en el pecho un abrazo tremendo:
feliz año, arbolito de mi calle,
feliz año, baúles de mi casa...

Que tenga feliz año
la sombra ya sentada de papá,
los sueños nacionales,
las gaviotas y el mar.

Feliz año, dolor,
rabia del pueblo,
odio del justo,
cólera del santo;
feliz año, fusil:
enséñame a cantar los años nuevos.


(Canto desde lejos, 1957)